1 jul 2014

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VITORIA-GASTEIZ POR UN SISTEMA AGROALIMENTARIO SOSTENIBLE (MANIFIESTO)

Tanto las instituciones como la población de Vitoria-Gasteiz han mostrado durante las últimas décadas un decidido alineamiento con la mejora de la calidad de vida y la sostenibilidad,  que se ha hecho evidente en el éxito de la utilización de la red de centros cívicos, la materialización del Anillo Verde, una política de mejora continua en la gestión del agua y de los residuos, cambios integrales en materia de movilidad sostenible y, fundamentalmente, en la sensibilización y demanda de la población de alimentos sanos y locales.

Sin embargo, la cuestión agroalimentaria sigue siendo un reto pendiente a pesar de los numerosos eventos y continuas experiencias que proliferan en nuestra ciudad orientadas hacia un sistema agroalimentario más sostenible, en su mayoría promovidos por una numerosa relación de agentes concienciados y decididamente implicados, aunque en algunos casos incluso desde dentro del propio ámbito municipal (huertas de ocio, alimentación en haurreskolak, etc.). Resulta también llamativa la escasa atención a la cuestión agroalimentaria en algunos de los documentos publicados durante los últimos años, como la Declaración de Vitoria-Gasteiz Green Capital 2012 leída en la clausura del Congreso Nacional de Medio Ambiente.

El municipio de Vitoria-Gasteiz comprende más de 60 núcleos rurales donde la actividad económica es la agricultura de un modo casi exclusivo. Sin embargo los cultivos se dedican casi en su totalidad a cultivos extensivos. La producción destinada al consumo local es testimonial.

En el municipio de Vitoria-Gasteiz se cultivan 11.000 has. De ellas 7.700 se dedican a cereal, 1.000 has a pastos, 900 a remolacha, 300 a patata, 900 has a oleaginosas, proteaginosas y cultivos forrajeros; y solamente 60 has a huerta, legumbres y frutales. Los planes medioambientales desarrollados por la municipalidad nunca han tenido en cuenta esta realidad ni se ha contado con las propuestas del conjunto de los pueblos, los cuales tienen su propia idiosincrasia. Se habla “de y para los pueblos pero sin los pueblos”. Tampoco El Planeamiento del territorio (P.T.P., D.O.T., planes urbanísticos) suelen contemplar criterios para mantener una producción cercana a la población urbana.

De acuerdo a los datos de población y los hábitos alimentarios de la ciudadanía de Vitoria-Gasteiz se estima que en nuestro municipio se sirven más de 800.000 raciones de comida diariamente. Esto supone que los alimentos están presentes en todos los ámbitos de nuestra vida (hogares, supermercados, pequeño comercio, máquinas expendedoras, comedores públicos, establecimientos de restauración, etc.), a la vez que un gran volumen de materias que es preciso producir, transportar, comercializar, cocinar, consumir y desechar continuamente.

Con relación a la producción de alimentos, los sistemas predominantes se caracterizan por estar orientados a producciones extensivas basadas en la utilización de gran cantidad de insumos en forma de fertilizantes inorgánicos, herbicidas, organismos modificados  genéticamente (aunque en Álava no existen cultivos transgénicos todavía), maquinaria, energía, etc. El impacto ambiental negativo de estos sistemas es evidente y se traduce en una manifiesta pérdida de biodiversidad, erosión de suelos, contaminación de aguas con nitritos, residuos de pesticidas, etc., además de los impactos sociales sobre las comunidades productoras. La mayor parte de este consumo se realiza en modelos convencionales, sin información ni preocupación por indicadores ambientales, en los que el factor precio juega un papel muy importante, por encima de criterios de sostenibilidad.

La comercialización se basa en el acopio de esos grandes volúmenes de alimento, almacenamiento y transporte hacia los puntos finales de consumo, lo que comporta un importante consumo de energía, principalmente de fuentes no renovables, como el petróleo. Como resultado, el sistema alimentario actual es dependiente en gran medida del consumo de derivados del petróleo (fertilizantes, combustibles, plásticos, etc.), y, como quedó de manifiesto en la subida generalizada en los precios de los alimentos observada entre los años 2006-08, es altamente vulnerable al más que seguro alza en los precios que cabe esperar para los próximos años. En el caso de algunas ciudades del Reino Unido, este ha sido uno de los argumentos que ha llevado a las autoridades municipales a apoyar iniciativas dirigidas a mejorar la resiliencia de las ciudades ante un eventual desabastecimiento.

Por otra parte, los hábitos de consumo actuales generan un volumen considerable de residuos, estimándose que entre el 30 y 50% de los alimentos que se producen, no llegan a ser consumidos, y que aproximadamente el 30% de los residuos urbanos están relacionados con el envasado de alimentos.

Pero además, incluso en el sistema agroalimentario actual existente en nuestro entorno más cercano, y tal como se desprende de los informes elaborados por el Observatorio de Alimentación, se ha generalizado el consumo de dietas muy desequilibradas (deficientes en frutas, legumbres y verduras, y excedentarias en proteína de origen animal) que acarrean unas tasas crecientes de problemas de sobrepeso, obesidad, diabetes, e hipertensión entre la población. Esto va en detrimento de los costes sanitarios y la calidad de vida de la población. Evidentemente, el consumo de alimentos que además de nutritivos estén exentos de residuos químicos, pesticidas, etc., relacionados con la incidencia de ciertos cánceres, contribuiría a reducir otras problemáticas sanitarias.

Por tanto, y dado que el alimento es un elemento central en nuestras vidas, se puede y se debe erigir en parte central de la solución a los retos que plantea la situación actual de crisis ecológica, social y económico-financiera de la sociedad en general, y de nuestra ciudad en particular: generación de empleos y desarrollo económico; fomento de hábitos saludables, adaptación a escenarios de cambio climático, crisis energética, reducción de emisiones y mitigación; lucha frente a la pobreza y desigualdades sociales, etc.  Para ello, es preciso avanzar más allá de las actividades meramente de sensibilización para empoderar verdaderamente a la población a través de la creación de entornos favorables a la producción, comercialización, selección y consumo de alimentos locales, saludables y sostenibles. Y la generación de sinergias entre las iniciativas existentes tanto actualmente  como en el futuro, es imprescindible para lograr una mayor difusión dentro de nuestra sociedad y atraer a otras personas que actualmente quedan al margen de estos circuitos.
Quiénes somos

Somos un conjunto de personas que, tanto de manera individual como en representación de una serie de agentes (asociaciones), consideramos que el sistema agroalimentario local puede y debe evolucionar hacia una mayor sostenibilidad sobre la base de:

La disponibilidad de alimentos sanos (sin residuos químicos), saludables, nutritivos, y a un precio justo para toda la población (tanto para personas consumidoras como productoras) además de ser un derecho, debe erigirse en una prioridad en el ámbito del diseño de políticas;

La promoción de actividad económica en torno al sistema agroalimentario que contribuya a la generación de empleo, vertebración social, y riqueza al servicio del Bien Común;
 
El fomento de sistemas locales de producción, abastecimiento y consumo de alimentos comprometidos con la generación de servicios ecosistémicos, que contribuyan a impulsar y reafirmar un sistema territorial más ecológico y sostenible, en el que se complementen los intereses del espacio rural y urbano;

El mantenimiento del equilibrio poblacional, cultural y de la actividad en los núcleos urbanos y rurales, protegiendo las actividades tradicionales de los núcleos más pequeños;

Una ordenación del territorio que considere y facilite un sistema agroalimentario local sostenible, que suponga la protección efectiva de las tierras agrícolas;

Reconocer, realzar y hacer notorio el papel de las mujeres en cuanto a la producción, cultura, comercio, proyectos empresariales agroalimentarios, trabajo familiar,...

Favorecer la transparencia y veracidad de la información adosada a los alimentos y puntos de comercialización respecto al sistema de producción, preparación, origen de producto e ingredientes,...

La puesta en valor del patrimonio cultural gastronómico en el marco de las actividades de sensibilización, y educación, y corresponsabilización destacando los componentes nutricionales, organolépticos, culturales y emocionales asociados al consumo de los alimentos.

Coincidimos con lo expresado en el documento de Propuestas para la Reflexión redactado con motivo de la European Green Capital, donde se hace referencia a la agroalimentación en algunos apartados, si bien de manera inconexa y sin una entidad propia:

“Potenciación de un nuevo tipo de agricultura respetuosa con el medioambiente y la promoción de los ciclos cortos y más racionales de producción, comercialización y consumo en materia de alimentación. De este modo, se contribuirá a reducir la huella ecológica de la ciudad y a aumentar la seguridad alimentaria”

“Puesta en valor de la actividad agraria como sector estratégico y elemento clave para la conservación del territorio”

“La ciudad debería impulsar la creación de empleo verde especialmente en los sectores de (…) la producción agroalimentaria ecológica y de calidad”

“Una atención especial al medio rural, con el apoyo a la bioproducción agroalimentaria. El conjunto de las entidades locales menores debería disponer de un plan de inversiones a corto y medio plazo con objetivos, programas y actuaciones concretos. Entre estos objetivos habría de incluirse la progresiva transformación del actual modelo productivo hacia otro más orientado a la producción ecológica de gran calidad destinada a los mercados cercanos”

Consideramos necesario...

Para poder hacerlo realidad, consideramos necesario llevar a cabo una serie de actividades a diferentes niveles:

A)    En el ámbito de la población, dar continuidad a iniciativas ya existentes, y procurar una mayor escala de las mismas, a partir de su cohesión y difusión. Es destacable la diversidad de experiencias que colectivos del municipio y el territorio han desarrollado en los últimos años o décadas, y que han contribuido a aspectos fundamentales como:

– el aumento de la producción ecológica y agroecológica en nuestro entorno

– el aumento del  consumo de alimentos locales, ecológicos y agroecológicos, mediante circuitos cortos de comercialización

– la sensibilización en torno al comercio y consumo responsable, como factor de sostenibilidad

– la difusión de iniciativas con trayectorias positivas en torno a los diferentes elementos que favorecen nuevos modelos alimentarios

– foros de reflexión y co-aprendizaje para la elaboración de alternativas prácticas, en los que han podido interactuar personas del ámbito productivo, social, institucional, educativo, empresarial…

– despertar el interés por conocer la importancia de perspectivas interdisciplinares, para poder profundizar en la complejidad que implica el diseño de una estrategia alimentaria

– prácticas colectivas de pequeño tamaño, en las que experimentar los beneficios de una alimentación que integre beneficios para la salud, el medio ambiente, la economía y la cultura: red de semillas, huertos urbanos, laboratorios del gusto, bosques comestibles, talleres de cocina …

Reforzar y entrelazar las numerosas líneas de trabajo que cuentan con un recorrido, junto con las nuevas que surjan, es parte fundamental de la base que ha de sostener la alimentación que deseamos para la sociedad urbana y rural de nuestra ciudad.

B) En cuanto al Ayuntamiento, cabría destacar las siguientes:

- Creación de un órgano mixto público-privado específico sobre la cuestión agroalimentaria que facilite la cooperación interdepartamental, así como la colaboración ciudadana, y de los distintos agentes públicos y privados mediante procesos de participación.

- Trabajar en implicar a otras administraciones y organismos con competencias en agricultura, alimentación y mercados para remar en la misma dirección

- Promover, facilitar y en su caso liderar la elaboración de un diagnóstico de la situación del sistema alimentario actual existente en nuestro municipio, así como la integración de la cuestión agroalimentaria en la definición del modelo de ciudad municipio para los próximos años;

- Colaborar en la habilitación de espacios de información (página web, listas de correo electrónico, etc.) en torno a las cuales en el seno del órgano mixto público-privado, que se pueda centralizar y difundir la información relativa a las numerosas iniciativas ya existentes.

- Fomento de mercados de productores y productoras locales periódicos (semanales), preferentemente ecológicos, no solo en las zonas habituales, sino en las nuevas zonas de expansión de la ciudad, adaptados a los hábitos de vida de los vecinos para servir de punto de encuentro a la producción y consumo locales;

- Recuperación de las instalaciones inicialmente destinadas a mercados municipales o de barrio al servicio de los objetivos del sistema agroalimentario, mediante colaboraciones público-privadas (ej: asociaciones de personas consumidoras y productoras) o facilitando circuitos cortos de comercialización de alimentos (ej: distribución de cestas);

- Fomento de las transiciones agroecológicas y de la agricultura ecológica tanto a pequeña escala para autoconsumo (ej: huertos en espacios públicos: parques, anillo verde, colegios, restaurantes, etc.) como a nivel profesional (ej. proyecto Basaldea) en el entorno urbano y periurbano; 

- Introducir el uso agroforestal en la configuración de la ciudad, promoviendo en la ciudad el uso de suelo dedicado a la agricultura urbana a través de los bosques comestibles

- Ampliar de manera progresiva los programas de abastecimiento de comedores públicos con alimentos locales, de calidad, preferentemente ecológicos al resto de áreas municipales (ej: Bienestar Social), y relacionando los avances en materia de alimentación saludable con la salud y satisfacción de las usuarias y usuarios (niñas/os y ancianos/as, principalmente). Igualmente la incorporación de dichos criterios a los alimentos usados en actos públicos o actividades de formación ofrecida en centros cívicos u otros de competencia municipal.

Pensamos que el Ayto. de Vitoria-Gasteiz debería seguir los pasos de las numerosas ciudades europeas (Malmö, Copenhague, Edimburgo, Tukums, Basilea, etc.), e incluso de nuestro entorno más cercano (Orduña, Zarautz, Noain, etc.) que ya han hecho una apuesta decidida por avanzar hacia un sistema alimentario más sostenible a través de la colaboración público-privada, y las han plasmado en una estrategia urbana.

En definitiva

Estamos dispuestos/as a continuar implicándonos en procesos de participación y a buscar fórmulas que permitan la colaboración con y entre las instituciones y departamentos involucrados, dirigida a incorporar la cuestión de la agroalimentación en el marco de los términos indicados con anterioridad de manera explícita y decidida en la agenda política del Ayuntamiento.

Pero ante todo, animamos al conjunto de las personas que conforman el tejido social de nuestra “rurbe” a tomar parte en un proceso que pretende afrontar parte de los retos ineludibles de nuestra sociedad.




ADHESIONES AL MANIFIESTO (hasta el 30 de septiembre de 2015):

 > ORGANIZACIONES <
- Agrotravel Turismo Responsable
- Arabako Ekologitak Martxan
- Asociación Ekologista Ekozaleak
- BioAlai
- Bionekazaritza
- Biosasun
- Bosques Urbanos Comestibles de Vitoria-Gasteiz BUC V-G
- Cesta Urbide S.C.
- Coordinadora de ONGD de Euskadi
- Economía del Bien Común-Euskadi
- Ekaia Eko-Gestión
- Ekobazter
- EQUO Vitoria-Gasteiz
- Fundación Zadorra
- Huerta de Arkaia
- Mugarik Gabe
- Naturarekin 1 Asamblea ecologista del Campus de Álava
- Ongi Etorri
- Osasunbizi Allegrat
- PlanBIKO, por el Bien Común
- Slow Food
- Solidaridad Vedruna SOLIVE
- SOS Racismo Araba
- Tramahuertas
- Zentzuz Kontsumitu

> PERSONALES <
- Aitor Amilibia
- Ana Lafuente López
- Ane Galarza
- Angel Fernández de Labastida
- Ángela Castro
- Bittor Rodríguez (Observatorio Nutricional de Vitoria-Gasteiz)
- Eduardo Urarte
- Elvira Calviño
- Eukene Rueda
- Henk Renting (Fundacion RUAF - Red Internacional de Centros de Recursos sobre Agricultura Urbana y Seguridad Alimentaria).
- Idoia Jalón Ayarzagüena
- Irene Vila
- Javier Goikoetxea Seminario 
- Jokin Lapaza
- José Ramón Mauleón
- Koldo Rey
- Lourdes Oñederra
- Nora Ortiz de Guinea
- Patxi Lauzurika
- Rakel Oion
- Roberto Ruiz de Arcaute (Asesor Agroecológico)
- Soledad López Agirre
- Txema Ruiz de Apodaka

Contacto: manifiesto181213@gmail.com